Mundos íntimos. Con mi hermano estábamos alejados. Él me escribió desde el hospital e iniciamos un hermoso reencuentro

Mundos íntimos. Con mi hermano estábamos alejados. Él me escribió desde el hospital e iniciamos un hermoso reencuentro
Fricciones. Quizás la clave haya sido dejar de lado las desavenencias y poner el acento en el enorme cariño que se tienen. Acompañarse, sin necesidad de reproches o de buscarle una razón a todo.